La UVic se suma a la celebración del Día Mundial del Agua

Coincidiendo con el Día Mundial del Agua, el 22 de marzo, la UVic-UCC ha organizado un conjunto de actividades para reivindicar esta jornada y para llamar la atención sobre la importancia del consumo y la gestión sostenibles de este recurso escaso. De martes a jueves, la entrada al campus Torre dels Frares ha acogido la exposición "SOS Fartet", un proyecto para mejorar el estado de conservación del fartet, un pez endémico en peligro de extinción, elaborada por Anna Badosa, del grupo de Ecología Acuática del Departamento de Biociencias de la UVic-UCC.

Asimismo, esta semana las pantallas digitales de los diferentes campus han recuperado una recopilación de imágenes del concurso fotográfico de Medio Ambiente que, con el tema "Fuentes y corrientes de agua", se celebró el año 2010 en la UVic-UCC. Por último, el programa "Desconocidos, conocidos" de la UVic Radio ha tenido como protagonista esta semana el coordinador del Centro de Estudios de los Ríos Mediterráneos, Marc Ordeix, en una entrevista centrada en los estudios de los ríos y del agua. El podcast de la entrevista se puede recuperar en el espacio web del programa.

También coincidiendo con el Día Mundial del Agua, el bloque UDivulga ha publicado dos artículos en torno a este tema: uno del director del Centro de Estudios de los Ríos Mediterráneos, Marc Ordeix, sobre el por qué es necesario celebrar un día como el de hoy, y otro de Lluís Benejam, codirector de la Cátedra del Agua, Naturaleza y Bienestar, que responde a la pregunta: "¿Es necesario que los ríos lleven agua?".

El agua como foco de interés

Más allá de focalizar la atención en el agua en una fecha concreta, durante todo el año la UVic-UCC impulsa y participa en numerosos proyectos y acciones de investigación, de divulgación científica y de transferencia de conocimiento, que tienen este elemento como eje central de interés a través de diversas cátedras, grupos de investigación o centros.

Es el caso de la Cátedra del Agua, Naturaleza y Bienestar, que tiene la UVic-UCC junto con la Universidad de Girona y el Ayuntamiento de Sant Hilari. Entre otras acciones, el último año ha puesto en funcionamiento un Consejo Asesor de la Cátedra, ha impulsado el proyecto "De Fuente en Fuente" junto con la Sociedad Catalana de Educación Ambiental y trabaja para convocar los primeros premios a trabajos de investigación del patrimonio natural de las Guilleries, en el que el agua juega un papel fundamental.

En cuanto al Grupo de Investigación en Ecología Acuática, los últimos meses ha culminado el proyecto SOS Fartet, en los parques naturales de los Aiguamolls del Empordà y del Montgrí, Illes Medes y Baix Ter, para determinar y mejorar el estado actual de conservación de este pez endémico amenazado de extinción y protegido tanto a nivel nacional como europeo. También ha avanzado en el desarrollo del proyecto de recuperación de dos estanques en la sierra de la Albera, en el Alt Empordà, junto con IAEDEN. Los trabajos llevados a cabo por los investigadores del grupo y del Centro Tecnológico BETA también han culminado en la publicación de varios artículos: por ejemplo, en febrero del año pasado, se publicó un artículo en Science donde se alertaba del peligro de la salinización del agua, mientras en septiembre la Horizon Magazine publicaba otro sobre un estudio liderado por la investigadora ICREA Sandra Brucet, donde alertaban que el cambio climático y la contaminación matan la biodiversidad en el agua dulce.

Además, junto con otras universidades europeas y canadienses, han puesto en marcha tres proyectos de investigación sobre los efectos que provocan impactos como el cambio climático y la extracción de agua en la biodiversidad y el funcionamiento de los ecosistemas acuáticos. El grupo de investigación también tutoriza estudiantes africanos que evalúan los efectos del calentamiento global en los ecosistemas de agua dulce y marinos de este continente. 

El Centro de Estudios de los Ríos Mediterráneos (CERM) participa, entre otros, en el proyecto Life Migratoebre, de recuperación de peces migradores y de mejora de la gestión en el tramo final del río Ebro, y acaba de presentar el informe de la estado ecológico de los ríos de Osona correspondiente al año 2016, un estudio que elabora desde hace quince años. Junto con el Centro Tecnológico BETA, también participa en el proyecto Horizon 2020 INTCATCH, que estudia y monitoriza el río Ter, incluidos sus embalses, y lo compara con el río Támesis, el lago de Garda (Italia) y el lago de Yliki (Grecia).

El Centro Tecnológico BETA (Red TECNIO) desarrolla otro proyecto Horizon 2020, el SMART Plant, para el escalado de tecnologías sostenibles que permitan la recuperación de recursos (materiales y energía) a partir de aguas residuales urbanas. El centro también es miembro de la Red META (Mesa Española de Tratamiento de Aguas), recientemente finalizó el proyecto TECNIOSPRING (Rivers of Salt) de Miguel Cañedo-Argüelles, y durante los próximos tres años liderará y coordinará el proyecto Interreg MED SYNGGI, que también abarca proyectos vinculados con el agua. En diciembre pasado terminó el proyecto Coste Action Water 2020, en el que también participaba el CT BETA, que durante cinco años ha abordado diversos retos en materia de tratamiento de aguas residuales.

Además, dispone de la planta de ríos artificiales de Manlleu, una instalación muy específica e innovadora, y participa en varios proyectos nacionales e internacionales en el marco de la determinación de la huella hídrica donde se han publicado algunos artículos recientemente: El “Water and carbon footprint of selected dairy products: A case study in Catalonia” y el “Carbon and water footprint of pork supply chain in Catalonia: From feed to final products”. El CT BETA también está llevando a cabo diferentes proyectos sobre tratamiento de aguas con empresas como Depuradoras de Osona o Ecoring (Alemania). Asimismo, en los últimos meses, investigadores del CT BETA han publicado diferentes capítulos de libro de estudios centrados en el agua.

Este año, las Naciones Unidas han querido convertir las aguas residuales en el eje central del Día Mundial del Agua, para generar conciencia sobre el riesgo de contraer enfermedades graves como el cólera, la disentería, la fiebre tifoidea o la poliomielitis debido al consumo de agua contaminada. Hay que tener en cuenta que más del 80% de las aguas residuales generadas en el mundo vuelven a ser vertidas en el ecosistema sin ningún tratamiento ni reutilización, y que 1.800 millones de personas utilizan una fuente de agua contaminada para el consumo diario. Se estima que esta situación provoca casi un millón de muertes anuales.