Una investigación analizará el poblamiento de anguilas en el Mediterráneo occidental, una especie que se ha reducido más del 95 % desde mediados del s. XX

Desde mediados del s. XX, la población de anguila europea se ha reducido en todo el mundo hasta tener una mínima presencia. Se calcula que en los últimos 50 años los efectivos de esta especie tan vulnerable se han reducido más del 95%. Las principales causas son la sobrepesca, la ruptura de la conectividad ecológica, la elevada contaminación química del agua (metales pesados, fármacos y plaguicidas) e infestaciones parasitarias (presencia de bacterias, virus y macroparásitos), entre otras. Para evaluar la situación actual de la población de anguilas en Cataluña y en la Cataluña del Norte, se ha puesto en marcha el proyecto “Estado sanitario de las anguilas europeas de estanques y cursos fluviales del Mediterráneo occidental: desarrollo de métodos no invasivos estudio de fuentes de contaminación y propuesta de medidas de restauración” (AnguillaMed). La investigación está coordinada por el Centro de Estudios de Ríos Mediterráneos (CERM) de la Universidad de Vic - Universidad Central de Cataluña (UVic-UCC) -con sede en el Museo del Ter (Manlleu)- y tiene una duración de tres años.

El descenso alarmante de anguilas motivó la implantación de un reglamento europeo (Reg. 1100/2007) para intentar preservar y restaurar la población de este pez en ríos, lagunas costeras, y litoral marino y oceánico. Aunque el número de ejemplares no se ha recuperado, esta legislación permitió evaluar el estado de las anguilas y mejorar el conocimiento de esta especie. Sin embargo, todavía falta información específica relacionada con los factores locales o regionales que pueden influir en la anguila. Por eso, el proyecto AnguillaMed pretende analizar el estado de salud de las anguilas en diferentes ambientes acuáticos y, al mismo tiempo, mejorar la gestión y restauración de estos hábitats.

AnguillaMed realizará un estudio de campo en doce lugares seleccionados, que corresponden a varias masas de agua de Cataluña y de la Cataluña del Norte. De entrada, el estudio se realizará en la demarcación de los Pirineos Orientales (partes bajas de los ríos Têt, Tech y Verdouble, y los lagos de Canet-Saint Nazire y Salses - Leucata), en la de Girona (parte baja de la ribera de Llançà, Aiguamolls del Alt Empordà y Aiguamolls del Baix Ter) y en la de Barcelona (tramo bajo de los ríos Tordera y Besós y lagunas del Delta del Llobregat). Se considera que todos estos sitios tienen diferentes niveles de presiones antropogénicas (producidas por los seres humanos).

Estudio del estado de los peces y ambientes acuáticos

Un aspecto innovador de este proyecto es que combina sistemas tradicionales para evaluar el estado sanitario de las anguilas (como el análisis de contaminantes en distintos órganos de los peces, la disección y observación de parásitos internos, etc.), con sistemas innovadores que no requieren  el sacrificio de individuos, aspecto esencial para poder realizar un seguimiento a largo plazo de este pez en peligro de extinción. A partir de la realización de dos campañas, una en otoño de 2024 y otra en otoño de 2025, los métodos que utilizarán y evaluarán los investigadores, pues, se centrarán en el análisis de metabolitos y bacterias asociadas a la mucosidad de la piel, el estrés oxidativo (a partir de muestras de sangre), y la detección molecular de virus y macroparásitos, entre otros.

Marc Ordeix, director del CERM, comenta que “este proyecto generará un grado de conocimiento profundo del estado de la anguila en nuestro entorno, gracias a la combinación de experiencias de unos y otros socios, de una gran valía científica pero también hará que se propongan medidas para su conservación de común acuerdo entre todos los interlocutores del territorio (administración, pescadores, ONG, etc.), con quienes se harán reuniones regularmente a lo largo de los tres años del proyecto. Todo ello debería favorecer la recuperación de la anguila y, al mismo tiempo, la de otras especies acuáticas”.

El proyecto AnguillaMed, pues, también debe permitir conocer el nivel de degradación de los ambientes o hábitats acuáticos continentales, lagunas costeras y cursos fluviales (ríos, rieras y torrentes), y centrarse en las causas del declive de la biodiversidad: el alteración de la hidromorfología y la hidrodinámica (régimen hidrológico, conectividad fluvial y condiciones morfológicas), la contaminación difusa, de origen agrario o industrial, etc. A partir de ahí, y teniendo en cuenta que la anguila es una especie indicadora de la calidad del medio acuático, la intención es proponer las medidas de restauración más adecuadas para estos hábitats, de acuerdo con los grupos de interés de cada puesto de estudio. Los resultados de la investigación también se espera que puedan ser extrapolables a otras regiones mediterráneas y europeas.

Para desarrollar esta investigación, el CERM de la UVic-UCC tiene, como socios, el Centro de Formation et de Recherche sur las Environnements Méditerranéens (CEFREM) de la Universidad de Perpiñán - Via Domitia, el Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios de el Agua - Consejo Superior de Investigaciones Científicas (IDAEA-CSIC) y el Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias (IRTA), con participación de la Agencia Catalana del Agua (ACA). El proyecto, AnguillaMed, con un presupuesto total de 1.641.168,60 euros, está cofinanciado en un 65% por la Unión Europea por medio del Programa Interreg VI-A España-Francia-Andorra (POCTEFA 2021-2027), el cual está financiado con fondos FEDER. El objetivo del POCTEFA es reforzar la integración económica y social de la zona fronteriza España-Francia-Andorra.

El próximo 22 de marzo tendrá lugar en la sede del CERM de la UVic-UCC, en el Museo del Ter (Manlleu), la primera reunión presencial entre los socios del proyecto AnguillaMed para definir su ejecución.