Manel Alías, Carme Colomina y Jordi Vaquer dibujan distintos horizontes posibles para la guerra en Ucrania
Las causas de la guerra de Ucrania, la situación actual y los horizontes posconflicto han sido los tres ejes de la mesa redonda “Ucrania, tierra de frontera”, que ha tenido lugar hoy en el Aula Magna de la UVic, organizada por la Facultad de Empresa y Comunicación, en el marco de los actos de conmemoración de los 20 años de los estudios de Periodismo, junto con el Consejo de Estudiantes. El acto fue moderado por el profesor Joan Masnou y contó con la presencia del periodista de TV3, Manel Alías; de la periodista del periódico Ara e investigadora de CIDOB, Carme Colomina; y del politólogo y director regional para Europa de la Open Society Foundations, Jordi Vaquer.
A la hora de desgranar las muchas causas que han llevado al conflicto, Jordi Vaquer ha explicado la visión imperial que Putin tiene de su país, con la que se puede trazar una línea continua que va desde la Rusia imperial hasta la actualidad, pasando por la Unión Soviética. Ha afirmado que "la misión de Putin es levantar un país que estaba de rodillas y volverlo a poner en el sitio que le corresponde" después de que Rusia, bajo la presidencia de Yeltsin, haya perdido influencia y se sienta amenazada por un cerco progresivo por parte de sus enemigos.
Para Ucrania, la tensión interna de mirar o hacia Europa o hacia Rusia es una cuestión que viene de lejos. Según ha afirmado Carme Colomina, desde la revolución del Euromaidan en 2014 se debate "entre el derecho de Ucrania de elegir con quien se quiere relacionar y el derecho de Rusia a decidir sobre el futuro de las repúblicas exsoviéticas". Sobre la mediación de Europa, Colomina ha sido taxativa: "la Unión Europea no ha podido hacer de mediadora con Rusia, porque Putin no la reconoce como contraparte y sólo negocia con Estados Unidos y China". También ha hecho referencia a la ambigüedad que ha jugado la Unión Europea hacia Rusia, ya que "algunos estados la ven como una amenaza y otros como una oportunidad de negocio". Todo ello, junto a la excesiva dependencia energética "la hacen vulnerable y Putin lo ha visto como una oportunidad".
La ciudadanía en choque
Desde la experiencia de haber vivido muchos años en Rusia, Manel Alías ha explicado cómo la ciudadanía ha encarado el conflicto. “Puede decirse que en ambos bandos se vive en estado de choque. Ucrania lo sufre con víctimas, exilio, y sus hombres combatiendo, pero siente el orgullo de país y que el resto del mundo está a su favor. En Rusia, por otra parte, cada vez hay más gente que no se cree la propaganda del régimen, comienzan a sufrir los efectos económicos, ven cómo el mundo los coloca en un sitio peor y encima no se pueden quejar”. Alías también ha explicado lo difícil que es trabajar de corresponsal en una zona de conflicto donde "cada bando quiere que expliques sólo su versión de los hechos cuando tu trabajo es contar algo tan sencillo como la verdad".
Los tres tertulianos han coincidido en que el escenario que se dibuja a partir de ahora es del todo imprevisible, y que aunque “nadie busca una 3ª Guerra Mundial, las escaladas deben tenerse en cuenta”. En la recta final de la mesa redonda han dibujado diferentes escenarios de futuro posibles del conflicto que pueden ir desde el enquistamiento de la guerra hasta una escalada difícil de prever, pasando por una mayor implicación por parte de Occidente en el conflicto.
Preguntados sobre si ven a Ucrania dentro de la Unión Europea, Colomina, ha afirmado que "se ha avanzado mucho en una respuesta en caliente, pero se va muy lento sobre cómo se debe avanzar". Sin embargo, Vaquer está convencido de que la interdependencia entre Rusia y Europa disminuirá, y que el conflicto comportará una confrontación global del orden internacional con nuevos ejes de relación entre China y Rusia, que de rebote supondrá una amenaza para India, que tendrá que replantear sus alianzas. Sea como sea, a Rusia se le abre un escenario muy complicado y, a pesar de que el modelo de Putin sea China, "las esperanzas de los rusos miran hacia otro lado", ha concluido Alías.