M. Cinta Sadurní, en colaboración con el periodista Xavier Bardolet, publica 'Enfermeras en guerra' en Eumo Editorial

Vic fue una de las ciudades escogidas por las Brigadas Internacionales para establecer uno de sus hospitales. Ocupaba las instalaciones del actual colegio El Escorial y estuvo operativo entre abril de 1938 y enero de 1939. Su historia, contada a partir del testimonio de algunas enfermeras que trabajaron, es también la historia de una guerra que movilizó a cientos de voluntarias y dio la vuelta a sus vidas. Y en ellas ponen el foco la profesora de la Facultad de Ciencias de la Salud y el Bienestar, M. Cinta Sadurní, autora de una tesis doctoral sobre el Hospital Internacional que funcionó en Vic en los últimos meses de la Guerra Civil, y el periodista de Osona Xavier Bardolet.

Cartas, informes y abundante documentación escrita que Sadurní ha podido consultar en el Archivo Estatal Ruso de Historia Sociopolítica (RGASPI) de Moscú, la colección Abraham Lincoln Brigade Archives (ALBA) de la Universidad de Nueva York, el Archivo General Militar de Ávila o el Centro Documental de la Memoria Histórica (CDMH) de Salamanca, han servido de base a un relato que combina el rigor con la vivacidad de los diálogos que permiten a los lectores oír la voz de las protagonistas. Enfermeras en guerra recrea el día a día del hospital: la dificultad para dispensar cuidados, comida y camas en momentos en que el centro llegó a acoger a más de 1.500 heridos y enfermos, la epidemia de fiebre tifoidea que dejó decenas de muertes, o las tensiones entre la dirección médica y el comisario político de turno, entre otros muchos episodios.

Según M. Cinta Sadurní, “los hospitales de las Brigadas Internacionales eran concebidos como unidades militares y eran, por tanto, territorio de los hombres. Se hablaba de combate, y no de pérdida o sufrimiento”. Es en las voces de las enfermeras donde descubrimos el dolor, la precariedad, a veces la negligencia, pero también la solidaridad entre mujeres procedentes de todas partes.  La mayoría eran jóvenes, con formación, voluntarias y decididas a luchar por los derechos y libertades que el fascismo amenazaba. Muy a menudo Vic fue para ellas un sitio de paso, porque ya habían trabajado en otros hospitales internacionales. Muchas siguen siendo anónimas. Pero algunas tienen nombre y voz en este libro que sale a la venta el día 23 de octubre y se presenta al día siguiente en el Museo de Arte Medieval (MEV), de Vic, a las 19 h.