La disminución del caudal de los ríos y rieras de Osona en 2023 reduce la disponibilidad de oxígeno en el agua para la fauna acuática
La sequía prolongada y persistente que sufre Cataluña desde 2021 ha provocado que haya ido disminuyendo el caudal y la calidad ecológica de los ríos y rieras de Osona. El bajón de agua circulante en los ríos de la comarca ha comportado que la que queda sea agua estancada y, en consecuencia, tenga unos niveles de oxígeno más bajos, lo que supone una amenaza para la supervivencia de los peces y de los macroinvertebrados acuáticos . Ésta es una de las constataciones del estudio Estado de los ríos de Osona 2023 elaborado por el Centro de Estudios de los Ríos Mediterráneos (CERM) de la Universidad de Vic – Universidad Central de Cataluña (UVic-UCC), área ambiental del Museo del Ter , y que se acaba de hacer público.
Otra evidencia que pone de manifiesto el estudio es que, en momentos de escasez de agua, la calidad de los ríos y rieras de Osona se ve muy afectada por la contaminación, ya sea directa o difusa. Los vertidos de depuradoras e industrias siguen siendo los mismos pero los contaminantes no pueden diluirse en el agua y quedan más concentrados. Por otra parte, desde el CERM también se ha observado un aumento de nutrientes en el agua en 2023. Este incremento, especialmente significativo en verano -en momentos de gran insolación y altas temperaturas-, puede derivar en un aumento de las algas, cuya presencia también supone un peligro para la desaparición de peces o macroinvertebrados.
Aspectos analizados y propuestas de mejora
El estudio del CERM confirma que la calidad biológica del agua que se obtiene a sufrir del estudio de macroinvertebrados acuáticos sigue disminuyendo desde 2021 en los ríos y rieras de Osona. Aunque en el 2022 ya se notaba esta bajada en algunos tramos muestreados del Ter y la riera Major donde normalmente la calidad es buena, en el 2023 se confirmó el declive en prácticamente todos los tramos muestreados del Ter y también el Ges en Forat Micó , que pese a obtener una buena calidad, no llegaba a los valores de calidad de los años anteriores.
Los parámetros físico-químicos (conductividad eléctrica, oxígeno disuelto, pH y nutrientes) de 2023 corroboraban también el bajón general de calidad. Sin embargo, el curso principal del Ter, el Ges en Forat Micó y la riera Major tenían una calidad buena o muy buena en la mayoría de parámetros (con alguna excepción puntual) mientras que el Meder, el Gurri y el Rimentol daban valores de calidad entre mediocre y mala. El pasado año destacaban concentraciones de nutrientes muy elevadas en la mayoría de los tramos y una concentración de oxígeno muy baja debido a la disminución del caudal.
La calidad del bosque de ribera en 2023 se mantuvo similar a los años anteriores, con categorías entre intermedias y buenas. Los ríos más urbanos o agrícolas, como Gurri, Meder y Rimentol, obtenían valores bajos por este parámetro, con un bosque de ribera con una degradación importante. Por su parte, los ríos más naturalizados o de cabecera tenían un bosque de ribera más consolidado y una calidad muy buena.
Ante esta realidad, desde el CERM se apuntan algunas propuestas encaminadas a mejorar la calidad del agua de los ríos y rieras de Osona. Entre estas propuestas destaca la menor aplicación de abonos en los campos de cultivo, un cambio de baremos en cuanto al vertido de las depuradoras en momentos de poco caudal circulante y la restauración de los bosques de ribera para facilitar el filtro de nutrientes provenientes de los campos de cultivo.
Dieciséis tramos fluviales incluidos en el muestreo
Los resultados del informe provienen de los muestreos realizados durante la primavera y el verano del año 2023, en los que se analizaron varios parámetros hidromorfológicos, físico-químicos y biológicos de un total de 16 tramos de río de la cuenca del río Ter en la comarca de Osona. Desde 2021 se han añadido seis puntos nuevos: tres a cargo de Liquats Vegetals, SA; uno de Aigües de Vic, SA y dos del Consorcio del Espacio Natural de las Guilleries-Savassona.
El CERM lleva a cabo desde el año 2002 una evaluación regular del estado ecológico de los cursos fluviales de Osona con el propósito de conocer su evolución y, en su caso, corregir posibles disfunciones. En 2023 el estudio anual del CERM ha continuado contando con el apoyo, mantenido desde los orígenes, de los Ayuntamientos de Vic y de Manlleu, y la colaboración del laboratorio de Depuradores de Osona, SL en la Estación Depuradora de 'Aguas Residuales de Vic.
La información completa se puede consultar en el documento EEOsona2023CERM (uvic.cat)