Finaliza el X Congreso Ibérico de Ictiología con el reto de aumentar la interrelación entre los investigadores y la administración
Incrementar las sinergias de trabajo entre el mundo académico y las administraciones públicas es uno de los principales retos que los expertos han puesto sobre la mesa en el X Congreso Ibérico de Ictiología, organizado por la Sociedad Ibérica de Ictiología (SIBIC), el Centro de 'Estudios de los Ríos Mediterráneos (CERM) y el grupo de investigación en Ecología Acuática de la Universidad de Vic - Universidad Central de Cataluña (UVic-UCC). Aunque algunos centros y grupos de investigación trabajan con proyectos aplicados de restauración y evaluación de los hábitats acuáticos codo con codo con las administraciones, se ha puesto de manifiesto la necesidad de una mayor interacción entre el personal investigador y los entes competentes —administraciones , gestores, empresas, confederaciones hidrográficas, etc.—, responsables de ejecutar las acciones de mejora. "Como comunidad científica también tenemos el reto de ir a buscarlos", comenta Lluís Benejam, investigador del grupo de investigación en Ecología Acuática de la UVic-UCC.
“Hay mucha información disponible sobre la situación de los peces continentales y marinos, pero quienes deben actuar en general no están o bien todavía están poco”, comentan los expertos. Ante el valor que tiene la ictiología ibérica, “es necesario que las administraciones actúen y se pongan las pilas; la diagnosis está muy profundizada, pero falta acción por parte de los gestores, porque existen muchas especies únicas en riesgo de desaparición”, explica Benejam.
Anna Sanitjas, directora general de Bosques y Gestión de Medio de la Generalidad de Cataluña, subrayó en la inauguración del congreso que en los últimos años “los ecosistemas fluviales son los que han perdido mayor biodiversidad”, por lo que, según dijo, "necesitamos la comunidad científica para tomar buenas decisiones".
Especies invasoras y falta de conectividad fluvial
Con el lema “Fishes for Future”, el congreso —que se ha hecho del 18 al 21 de junio— ha mostrado que uno de los grandes problemas a abordar es la creciente presencia de especies acuáticas invasoras o alóctonas. En los ríos de Cataluña hay 32 especies de peces autóctonas y en la península Ibérica, 70, mientras que las especies invasoras establecidas en Cataluña son como mínimo 24 y en la península Ibérica, más de 30. En este sentido, hay que tener en cuenta que “ el 80% de las especies ibéricas son endémicas, es decir, que sólo se encuentran aquí y no existen en el resto del mundo”, explica Marc Ordeix, director del CERM.
Otro dato a tener en cuenta, es que "en Cataluña el 80% de especies autóctonas de río tienen algún problema de conservación y en la península Ibérica lo tienen el 67%". Las especies de mar, por su parte, tampoco son ajenas a los problemas de conservación. “Los tiburones y manadas están sufriendo la sobrepesca y el calentamiento de la temperatura del mar, tanto en el Atlántico como en el Mediterráneo”, destaca Ordeix.
Una de las razones que explican la creciente presencia de especies invasoras, que aparecen de forma involuntaria, es que éstas aprovechan las alteraciones del medio ambiente y la mala calidad físico-química del agua, por ejemplo, y son más resistentes. Otra razón es que la gente quiere pescar en los ríos de Cataluña especies de peces de fuera, atraídos por lo que ven en revistas o documentales.
Entre las cuestiones que también se han tratado en el congreso ha destacado la insuficiente conectividad ecológica de los ríos, sobre todo a causa de infraestructuras hidráulicas, como presas, esclusas, pasillos y bases de puente, entre otras. Esta carencia de conectividad supone un impedimento para que las especies de peces no sólo puedan desplazarse libremente sino también reproducirse.
Teresa Ferreria, profesora de la Universidad de Lisboa, en la sesión plenaria de apertura del congreso, expuso los efectos de la presión antropogénica en los cursos fluviales y la necesidad general que existe en gran parte de Europa de restaurar los hábitats acuáticos . En este sentido, destacó la importancia de asegurar la conectividad de los ríos, puesto que "las barreras existentes tienen un efecto directo en la pérdida de especies".
Herramientas y metodología de investigación
Entre otras novedades, esta edición del congreso ha incluido temas como los peces de agua dulce y marinos y la acuicultura. “El sector marino cada vez va estando más presente en los congresos, a diferencia de hace unos años, que no estaba. Hemos logrado implicarle y no hablar sólo de aguas continentales”, apunta Ordeix.
Otro de los aspectos que también ha puesto de relieve el X Congreso Ibérico de Ictiología son las últimas innovaciones técnicas en investigación acuática. Una de ellas es, por ejemplo, el análisis de la biodiversidad partiendo del ADN ambiental. "A partir de restos de los genes que existen en el agua, y mediante el tratamiento adecuado de la muestra, te permite saber qué especies hay en una zona", explica el director del CERM. Otras técnicas son la telemetría, el marcado de peces con emisores de ultrasonidos y los estudios realizados a partir del sonido ambiental, por lo que se estudia el paisaje sonoro de debajo del mar o de dentro de un río para saber el estado de aquellas aguas o bien para reconocer las especies que habitan en ella.
En el congreso, que se clausura esta tarde, se han presentado unas setenta comunicaciones y han asistido 178 personas, procedentes mayoritariamente de la península Ibérica, pero también de varios países de todo el mundo. La próxima edición de este evento, de periodicidad bienal, se realizará en el municipio de Vila Real (Portugal) en 2026.