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El 81% de hombres y el 75% de mujeres han sufrido al menos una experiencia de violencia interpersonal dentro del deporte cuando era niño o adolescente

Presentación del proyecto CASES

El 81% de hombres y el 75% de mujeres han sufrido al menos una experiencia de violencia interpersonal dentro del deporte cuando era niño o adolescente

La violencia interpersonal contra niños y adolescentes en el mundo del deporte es una realidad pero la prevalencia de esta violencia es mayor para los niños que para las niñas. Dentro del deporte, en España, el 81% de los hombres declara haber sufrido cuando era niño o adolescente al menos una experiencia de cualquier tipo de violencia interpersonal mientras que en el caso de las mujeres fue un 75%. De forma más específica, y siempre en el contexto de cualquier tipo de práctica deportiva, el 72% de los hombres y el 66% de las mujeres ha sufrido violencia psicológica; el 50% de los varones y el 36% de las mujeres ha vivido violencia física; y el 41% de los hombres y el 27% de las mujeres ha tenido al menos una experiencia de negligencia en el deporte antes de los 18 años. En cuanto a la violencia sexual sin contacto, un 39% de los hombres y un 33% de mujeres declaran haberlo sufrido mientras que un 26% de los hombres y un 14% de mujeres manifiestan haber vivido al menos una experiencia de violencia sexual por contacto dentro del deporte antes de los 18 años.

Estos son algunos de los datos que se desprenden de la encuesta realizada a más de 10.000 personas de seis países europeos (Alemania, Austria, Bélgica, España, Reino Unido y Rumanía) en el marco del proyecto europeo Child Abuse in Sport -European Statistics (CASES). Este proyecto tiene por objetivo apoyar los esfuerzos estratégicos que se están realizando para prevenir el abuso, la explotación y la violencia infantil en el deporte; y desarrollar recursos para el sector del deporte que ayuden a las organizaciones deportivas a velar por el bienestar de los niños, niñas y adolescentes. El proyecto CASES ha estado liderado en España por las investigadoras Montse Martín y Eva Cirera, del grupo de investigación GREAF de la UVic-UCC. El proyecto lo ha dirigido Edge Hill University y también ha participado Bergische Universität Wuppertal, Universitäts Klinikum ULM, University of Antwerp y Universität Wien.

La presentación de los resultados del proyecto CASES se ha realizado hoy jueves por la mañana en la sala Segimon Serrallonga de la UVic-UCC, en una jornada que ha inaugurado Jordi Collet, vicerrector de Investigación y Transferencia del Conocimiento de la UVic-UCC. La jornada también ha contado con la participación de Manuel Ramos de Rosa, de la Fundación Deporte Joven; Ana Greco, de la Universidad de Barcelona; Iñaki Alonso, del Athletic Club; y Laura Sabaté, de la Fundación Barça.

En el deporte a nivel internacional
La investigación del proyecto CASES ha querido responder a la pregunta "¿Cuál es la prevalencia de la violencia interpersonal contra los niños activos en el deporte organizado, dentro y fuera del deporte?". Por eso se recopilaron pruebas científicamente sólidas sobre la escala y las dinámicas de la violencia interpersonal contra menores en el deporte (IVAC). En España, 1.472 personas contestaron el cuestionario, de las cuales la mitad eran mujeres y la otra mitad, hombres (menos de 1% respondieron ser “no binarios” o “prefiero no contestar”). Todas las personas encuestadas tenían entre 18 y 30 años y se les preguntó sobre sus experiencias en el deporte organizado (fuera del currículum escolar) antes de cumplir 18 años.

Una de las conclusiones que ha puesto de relieve este estudio es que la prevalencia de la violencia interpersonal contra los niños es menor para los encuestados que practican deporte a nivel recreativo (68%) y más alta para los que compiten a nivel internacional (84 %). En España el porcentaje es mayor que en Europa ya que a nivel recreativo supone el 70% ya nivel internacional, el 91%. "El salto del deporte recreativo al deporte de competición local, en particular, parece aumentar el riesgo de sufrir violencia", explican Martín y Cirera. Además, el riesgo de experimentar una mayor duración de la violencia interpersonal aumenta con el nivel de rendimiento. "La parte de la muestra que practicaba su deporte a nivel competitivo nacional e internacional antes de los 18 años indicaron más largas duraciones de violencia psicológica, física y sexual sin contacto que quienes practicaban nivel competitivos inferiores o deporte recreativo".

La experiencia de la violencia interpersonal en el deporte organizado durante la infancia y la adolescencia es un problema generalizado. Tanto es así que más de tres cuartas partes de la muestra respondió haber sufrido al menos una vez alguna experiencia de violencia interpersonal dentro del deporte cuando eran niños o adolescentes. Según las conclusiones de la investigación, los perpetradores de la violencia interpersonal dentro del deporte han sido predominantemente identificados como hombres, pero no exclusivamente puesto que las mujeres fueron responsables de una proporción sustancial de las experiencias relatadas por las personas encuestadas.

Por parte de conocidos y en los clubs
Otro resultado significativo del estudio CASES es que la violencia interpersonal en niños y adolescentes es perpetrada tanto por adultos (frecuentemente por el entrenador o el instructor) como por iguales (por ejemplo, compañeros y miembros del equipo o del club). Los autores de la violencia interpersonal suelen ser conocidos del niño o joven que la padece. De media, la experiencia involucró a un adulto desconocido en sólo el 6% de los casos, “mientras que los entrenadores, otro personal deportivo y otros adultas conocidos estuvieron implicados en el 43% de los casos de media”, subrayan las investigadoras del GREAF. Por el contrario, los compañeros desconocidos estuvieron implicados en el 19% de los casos frente al 44% perpetrados por compañeros conocidos.

La mayoría de los encuestados que sufrieron violencia interpersonal dentro del deporte no desvelaron su experiencia más grave y la revelación a alguien dentro del deporte fue poco frecuente (6% de los participantes). En este sentido, Martín y Cirera subrayan que “es mucho más probable que las revelaciones se hagan a un miembro de la familia oa un amigo o amiga; más allá de los entornos de amistades y de la familia, los sectores más propensos a recibir una revelación fueron los de educación y salud”. Cabe señalar también que la violencia interpersonal contra niños y adolescentes pasa a toda la gama de contextos organizativos en los que se practica el deporte para menores (incluidos los entornos deportivos de élite y los privados). Sin embargo, “el club deportivo es, con mucho, el lugar más frecuente donde se produce violencia interpersonal”.

Un problema más allá del deporte
A pesar de los resultados presentados hasta ahora, la experiencia general con el deporte de los adultos que practicaron durante su juventud es muy positiva. El 82% de los encuestados calificó la experiencia general como buena o muy buena (41% respectivamente). "Este es un resultado muy positivo para el sector del deporte, pero también puede sugerir que la violencia interpersonal está, hasta cierto punto, normalizada dentro del deporte", apuntan las investigadoras del GREAF. “El deporte puede ser un lugar de violencia interpersonal, explotación y abuso y al mismo tiempo una fuente de logros personales, autoeficacia y apoderamiento. Desde la psicología nos dicen que las víctimas logran salvaguardar los aspectos positivos vinculados al deporte independientemente de las violencias sufridas”.

El proyecto CASES también revela que la prevalencia de la violencia interpersonal dentro del deporte (78%) es ligeramente inferior a la de fuera del deporte (84%), lo que demuestra que “la violencia contra los niños y jóvenes es un problema generalizado en nuestras sociedades que afecta tanto al deporte como a otros ámbitos de la sociedad”. De hecho, la prevalencia de esta violencia dentro y fuera del deporte es muy similar en todos los contextos de los seis países europeos participantes, aunque el nivel de prevalencia en España se encuentra dentro de las medias más altas europeas .

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